
Comentario de Marc Rivard, obispo Raeliano y doctor en medicina (compartido por MAITREYA RAEL):
Artículo original en portugués: Conozca al médico que afirma que los fármacos están para matarnos. Y no es el único
“Es obvio que las compañías farmacéuticas no dan acceso a estudios de resultados negativos. Esto ha sido sabido por un largo tiempo y es el motivo por el cual, tan pronto como una nueva droga – anti depresiva u otra – es colocada en el mercado, muchos estudios independientes son realizados y TODOS los resultados son luego publicados.
Una rápida búsqueda en Pubmed resulta en 2800 estudios independientes sobre los efectos adversos y riesgos de los antidepresivos (vean imagen debajo).
Por lo tanto, la información está disponible para todos y proviene de fuentes confiables. Los resultados farmacéuticos nunca son 100% completos o confiables.
Las compañías farmacéuticas no hacen ciencia, hacen lobismo y marketing y es un modelo de negocios del salvaje capitalismo.
Entonces, este artículo no nos enseña cosa alguna. Incluso comienza con un prejuicio totalmente falso y sobreutilizado (pleonasmo).
“La profesión médica está siendo llevada por la industria farmacéutica…”
Cada país tiene su propio sistema de salud. En los EEUU la profesión médica no es llevada por las farmacéuticas pero es fuertemente controlada por las compañías de seguros. Aquí en Canadá, la profesión médica es más independiente.
¿Acaso las compañías farmacéuticas tratan de vender sus nuevas drogas por fuerte publicidad y análisis incompletos? Sí.
¿Acaso las compañías farmacéuticas nos pagan para utilizar estas nuevas drogas? No
Todos los doctores quienes publican y dan conferencias deben absolutamente mencionar a sus lectores o a su audiencia si están en un conflicto de interés (financiamiento farmacéutico, accionista, pagado por farmacéuticas…)
También, los doctores no son estúpidos. Cualquier Dr. competente sabe cómo las compañías farmacéuticas funcionan y siempre es muy cuidadoso con las nuevas drogas. Él espera unos cuantos años antes de prescribir estas nuevas drogas, para así revisar estudios independientes y hacer su propio criterio.
Finalmente, en cualquier plan de tratamiento, el doctor está ahí para evaluar los beneficios y riesgos para el paciente. Él toma una decisión que siempre está destinada al bienestar del paciente y no al bienestar de las farmacéuticas.”