
Comentario de MAITREYA RAEL:
“Por supuesto su reino debe ser independiente del “estado” artificialmente creado por la colonización como todos los demás reinos en África. Ninguna real descolonización será lograda hasta que los estados marionetas creados por europeos sean desmantelados y haya un retorno a las fronteras de los reinos pre colonización las cuales respetan la verdadera etnia y la separación de idiomas, todos estos estados unidos en una Federación llamada Reinos Unidos de Kama, y con su propia moneda panafricana.”
Un rey africano fue encarcelado mientras su pueblo lucha por la independencia
Charles Wesley Mumbere, rey de Rwenzori y apasionado independentista, fue detenido tras una serie de duras protestas en los que murieron unas 60 personas. Los enfrentamientos se dieron esta semana entre combatientes tribales separatistas, apoyadas por el rey Mumbere, y las fuerzas policiales de la República de Uganda, en el marco de los cuales fue detenido el rey Mumbere, que encabeza a los independentistas.
Según la versión del gobierno ugandés, los combatientes de la tribu bakonzo, liderada por el rey Mumbere, atacaron un puesto de la Policía, cerca de la ciudad de Kasese, a unos 400 kilómetros al oeste de Kampala. La residencia del rey fue asaltada por las fuerzas policiales y el monarca fue puesto bajo arresto. El distrito, donde está Mumbere, registra una fuerte oposición al presidente Yoweri Museveni, que perdió allí en las últimas elecciones presidenciales.
Nacido en 1953, Mumbere es el rey del pueblo bakonzo, perteneciente al Reino de Rwenzori (o Rwenzururu), de Uganda. La región fue restaurada como “monarquía tradicional” a principios de los años 90 después de una interrupción de dos décadas. Su padre, el rey Isaya Mukirania Kibanzanga, había muerto en 1966 mientras lideraba un movimiento independentista en las montañas Rwenzori, o “Montañas de la Luna”.
Las monarquías tradicionales ugandesas fueron abolidas en 1967 por el dictador Idi Amin, y tras el retorno de la democracia, en 1993, el presidente Yoweri Museveni decidió restaurar a sus reyes tribales en sus respectivos. Hay reyes en las regiones de Toro, Busoga, Ankole, Bunyoro, Buganda y Rwenzori, y reciben la reverencia, y el respeto de las poblaciones de las tribus que yacen bajo su corona.
Estos reyes, sin embargo, carecen de poder político alguno. Presiden las ceremonias religiosas y festividades más importantes de sus tribus, y reciben de parte del Estado ugandés palacios, personal de servicio, un automóvil digno y dinero para su mantenimiento, pero el único papel político que pueden llegar a ostentar es el de aconsejar al presidente de Uganda sobre temas concernientes a sus respectivos pueblos. La última monarquía restaurada fue la de Rwenzori, en 2009.
Ese año, el presidente Museveni pidió a Mumbere, que trabajaba como enfermero en un geriátrico de los Estados Unidos, que regresara a Uganda para hacerse cargo del cetro de sus antepasados y ser coronado “omuzinga” (rey). Mumbere había vivido durante un cuarto de siglo en Pennsilvania sin contarle a nadie sobre su origen monárquico. Ya instalado en un palacio de Kasese, se le entregó una corona y un manto multicolor, las reverencias de todo el pueblo, pero Mumbere, como sus colegas ugandeses, no tiene poder real y ni una sola responsabilidad política.