Ella le dijo: “No llames al médico, quiero descansar en paz, con tu mano en la mía.” Él le habló del pasado, de cómo se conocieron, de su primer beso. No lloraron, sonrieron. No se arrepentían de nada, estaban agradecidos. Entonces ella repitió en voz baja: “¡Te amo por siempre!” Él le devolvió las palabras, le dio un suave beso en la frente. Ella cerró los ojos y descansó en paz, con su mano en la de él. El amor es realmente lo único que importa, porque todo el mundo viene a este mundo sin nada más que amor y se va sin nada más que amor. Pensemos en ello. La profesión, la carrera, la cuenta bancaria, nuestras posesiones son sólo herramientas, nada más. Todo se queda aquí. Así que todo lo que tienes que hacer es amar…  ❤️
Amar a los que te aman de verdad. Ama, como si no hubiera nada más importante en tu vida.❤️
Imagen compartida por MAITREYA RAEL